Adiós a Buenafuente

Buenafuente se marcha. Tras más de 300 programas, Andreu Buenafuente termina su andadura nacional en Antena 3. El motivo, probablemente, la baja audiencia. De más de un 20% en sus inicios (llegando a superar en al menos una ocasión a Crónicas Marcianas) a un 16% de media en las últimas semanas. Seguramente, haya habido diversas negociaciones entre Andreu Buenafuente y Maurizio Carlotti (consejero delegado de Antena 3), pero parece que ya no hay nada que hacer.

Yo (como prácticamente toda Cataluña, Comunidad Valenciana e Islas Baleares) era un gran fan de Buenafuente durante los 10 años que pasó en TV3. Oriundo de Lleida, cuando me trasladé a Madrid en 2003, una de las grandes pérdidas televisivas que sufrí fue dejar de ver el programa de Buenafuente. En consecuencia, cuando leí en una revista que iba a fichar por Antena 3 me alegré sobremanera, le deseé suerte y vi su programa desde el primer día. Era el mismo programa (en esencia) que el que hacía en TV3. Continuaba siendo divertido, original, ingenioso y ameno, y sin duda, el mejor programa de entretenimiento del momento (y salvando Sé lo que hicisteis..., lo sigue siendo). Por tanto, ¿cuál ha sido el problema?, ¿por qué ha caído?, ¿cuál es el fallo?

El programa es bueno, de eso no hay duda, pero, sin embargo, tiene sus puntos flacos. Uno de los mayores problemas del programa (sino el mayor) es el horario, se emite demasiado tarde (en TV3 se emitía en horario de máxima audiencia y no en late-night). En segundo lugar, la duración, excesiva para la hora en que se emite. Dentro del programa: las entrevistas eran algo flojas (Andreu es un buen cómico, pero no un gran entrevistador), los concursos insulsos e innecesarios (aunque alguno llegó a tener gracia durante un tiempo) y el factor chicle, excesivo. ¿Factor chicle? Sí, me explico. La gran sensación del programa fue, desde el principio, El Neng. El amiguito del progressive (sin ser el mejor personaje del programa) se convirtió de la noche a la mañana en un ídolo de masas, y su frase, la más repetida de España. Sin duda era un buen personaje, pero nada es eterno; quisieron estirarlo demasiado y la gente se cansó.

Obviamente no todo es malo. Los monólogos son buenos (aunque tenía más gracia en catalán), las actuaciones musicales, la banda, el follonero, las noticias, la niña de Shrek y la mayoría de personajes (sobretodo los interpretados por David Fernández). Sin embargo, el horario (seguramente, negociado hasta la saciedad) y los puntos flojos del programa pudieron con él.

Entonces, ¿se acabó Buenafuente? Pues lo más probable es que no. La productora de Buenafuente "El Terrat" (Homo Zapping, Dos rombos, Todos ahhh... 100, Buenafuente) es una de las dueñas de La Sexta, junto con "Bainet" (Arguiñano), "Globomedia" (Emilio Aragón), entre otras. Así que sería muy raro (y ya se empiezan a oír rumores) que Buenafuente no acabe en La Sexta la próxima temporada. Esperemos que sí.